El duque de Edimburgo ha regresado ya a casa después de un mes hospitalizado. Se ha podido ver al marido de la reina Isabel II abandonando el Hospital King Edward VII en un coche, una excelente noticia que pone fin al que ha sido el período más largo que ha pasado en un hospital. El palacio de Buckingham ha emitido el siguiente comunicado: «El duque de Edimburgo ha sido dado de alta del Hospital King Edward VII y ha regresado a Windsor después de recibir tratamiento por una infección y de ser operado debido a un problema preexistente. Su Alteza Real quiere dar las gracias al equipo médico que le trató, tanto en el Hospital King Edward VII como en St Bartholomew’s Hospital, y a todos los que le enviaron sus mejores deseos«.
Fue el pasado 17 de febrero cuando el marido de la reina Isabel era trasladado al Hospital King Edward VII por consejo de su médico, una medida que fue tomada en primer momento por precaución y para vigilar su estado de salud. No obstante pasadas unas dos semanas, el 1 de marzo, se sabía que había sido trasladado a otro centro, St Bartholomew’s Hospital, donde se le trató una infección que padecía y donde fue intervenido de una afección cardiaca preexistente (se recuperó de esta en el King Edward VII al que fue trasladado de nuevo).
Durante este tiempo, Buckingham ha ido informando puntualmente sobre su estado de salud, igual que sus hijos y nietos. El príncipe Eduardo comentaba que su padre “se encontraba bien y «con muchas ganas de salir», una información que reiteró también Camila, mujer del príncipe Carlos. Fue él quien pudo visitarle los primeros días, transmitiéndole todo el cariño de la familia y la cantidad de mensajes que recibían dirigidos a él. El Palacio de Buckingham comentó que la Reina se encontraba calmada y continuaba con sus deberes como jefa del Estado durante el tiempo en que su marido permaneció ingresado. No dieron detalles sin embargo sobre el contacto que habían mantenido mientras el Duque estaba en el hospital.