Selena Quintanilla fue una de las estrellas latinas más reconocidas en el mundo: su talento y su habilidad para los negocios la convirtieron en una leyenda. Hoy, 26 años después de su muerte, su historia inspira canciones, series de Netflix, películas, líneas de cosméticos y ropa, por lo que su nombre se traduce en ingresos para la familia de la cantante y sus herederos.
Pese a su brevedad, la carrera de la artista de ascendencia mexicana y cherokee fue muy fructífera: le permitió obtener enormes ganancias en vida, y también siguió dándolas tras su fallecimiento en 1995. Un año antes, en 1994, Selena ganó un premio Grammy, convirtiéndose en la primera intérprete texana en alcanzar el primer lugar de los 200 discos latinos mejor vendidos de todos los tiempos.
A sus 23 años, amasaba una fortuna de 25 millones de dólares, según el sitio The Richest. Tras su asesinato a manos de Yolanda Zaldívar, amiga y presidenta del club de fans de la “reina del tex-mex”, el dinero pasó a sus padres y a su viudo Chris Pérez, con quien se había casado en 1992, ante la ausencia de un testamento que indicara lo contrario.
Si bien la artista ganó su popularidad por su trayectoria musical, también tenía una faceta emprendedora: era dueña de una cadena de tiendas de indumentaria y cosmética que le generaron cerca de 5 millones de dólares. Muy involucrada en su imagen, diseñaba su propio vestuario para sus presentaciones, con un costo estimado de 50.000 dólares por show, y lo acompañaba con joyas valuadas en unos 30.000 dólares.
Luego de su muerte, su esposo decidió que Abraham Quintanilla, el padre de Selena, fuera el albacea de su patrimonio, pues tenía más conocimiento de la industria musical y las cuestiones económicas, de las que solía ocuparse antes del fatídico día. Así, Pérez cedió los derechos del nombre, la voz, las fotografías y la historia de vida de la cantante, pero nunca se imaginó que quedaría excluido para siempre.
En 1996, Quintanilla y Pérez accedieron a dar una entrevista al programa de noticias Primer impacto, de la cadena Univisión, donde aseguraron que los bienes habían sido divididos en partes iguales.
Se calcula que la película biográfica de Selena, estrenada en 1997 y protagonizada por Jennifer Lopez, generó más de 35,2 millones de dólares en Estados Unidos y otros 35 millones de dólares en el resto del mundo, además de unos 6 millones en DVDs y regalías.
A principios de 2012, Pérez publicó el libro To Selena With Love, por el que recibió una demanda de su exsuegro con el argumento de que había violado el acuerdo de sucesión. En ese momento, el viudo se defendió diciendo que había firmado el documento bajo coacción, porque Abraham se había aprovechado de la situación de vulnerabilidad que atravesaba durante el duelo por su esposa.
La disputa siguió, incluso, en los últimos meses: Pérez hizo un duro descargo en su cuenta de Instagram, en la que aseguró que los Quintanilla lo habían sacado de las fotos familiares. “Escuché que estaban tratando de volverme inexistente en el legado de Selena… Adelante”, apuntó en un post de Instagram. Cabe destacar que la pareja se casó a escondidas de los padres de la artista, pues se oponían a la relación.