Entre fiestas de celebridades y alfombras rojas, salieron a relucir los cortes de cabello y peinados que podrían ser tendencia para el 2017. Presta atención, toma nota y ve un paso delante de la moda.
El “Long Bob XL” o cabellos a la altura de la clavícula, es uno de los favoritos en su versión lisa, ondulada o rizada. El corte sobrepasa ligeramente los hombros y favorece a todos los tipos de rostro, además de ser la mejor opción para aquellas chicas que tienen el cabello largo y quieren un cambio de look sin arriesgarse demasiado.
El “Swag” es la evolución del Bob. Consiste en un fleco ligero y desaliñado que enmarca el rostro, acentuando los pómulos y barbilla. Las capas deben ser largas y es ideal si se tienen ondas naturales. Por ser más largo que el clásico “Bob” no requiere estar demasiado pendiente del corte, sólo hacerle algunos retoques para mantener la fluidez del peinado.
El “Carré” es esa melena tipo francesa sobre los hombros, con flequillo recto y tupido. La base es el típico “Bob” pero despuntado a la altura del mentón y con menos rigidez. No es un rostro que favorece a todos los rostros; sólo le queda bien a los rostros ovalados o triangulares. Es cómodo, fácil de llevar y si tu cabello es liso natural ni siquiera tendrás que peinarlo o secarlo después del lavado. Además de ser fácil de mantener es muy femenino y chic. Si tu cabello es ondulado también puedes usarlo, pero déjalo al natural.
“WOB”, de esa manera apodaron el peinado que pusieron de moda celebridades como Jennifer Lawrence, Scarlett Johansson y Lucy Hale. Es un corte hasta el mentón o los hombros con un mix entre cabello ondulado, mechones despeinados y rulos románticos. Lo icónico de este estilo es que las ondas se vean lo más naturales posibles para darle cuerpo y volumen al cabello. Si tu melena es lisa puedes conseguir este efecto con un rizador en algunas secciones del cabello.
El “Hair coutouring” se trata de una tendencia de coloración que busca contornear el rostro a través de distintas tonalidades en el cabello, con lo que se busca resaltar y corregir las facciones de la cara. Esta técnica consiste en jugar con las luces y las sombras del cabello. Sin embargo, cada tipo de rostro necesita una coloración que favorezca sus rasgos, ya sea pelirrojo, moreno, castaño o rubio.