La relación entre Meghan Markle y la reina Isabel II se vuelve cada vez más tensa. Luego de que el príncipe Enrique y su esposa anunciaron que se retirarían de sus labores como miembros de la realeza, la actriz continúa tomando decisiones que molestan a la soberana.
El príncipe se encuentra en Reino Unido para cumplir compromisos. Markle sigue en Canadá, de donde tomará un vuelo para encontrarse con él. Sin embargo, la actriz dejará a su hijo, el pequeño Archie, en ese país.
La decisión de dejar a Archie al cuidado de una niñera y amiga, Jessica Mulroney, disgustó a la reina Isabel II. El medio Sunday Times informó que la monarca, de 93 años de edad, está «devastada» por la decisión. La reina ama a los bebés y se ha quejado de que prácticamente no conoce a su nieto.
El pequeño Archie pasó Navidad en Canadá, donde reside desde que sus padres decidieron abandonar sus títulos de realeza. El nieto de la reina tampoco podrá ver a Carlos ni a los demás miembros de la familia real debido a la decisión de Meghan Markle.
Eso fue considerado por muchos como una confrontación con de la familia real y un gesto de desprecio hacia sus miembros.
Noticia de: El Nacional.