El director del documental Francesco, Evgeny Afineevsky, recibió este jueves en el Vaticano el premio Kineo de cine en la categoría de Película para la Humanidad, por este trabajo estrenado ayer en Roma que repasa el pensamiento y las acciones del papa.
El documental refleja la mirada del papa Francisco “sobre la Humanidad, que esta viviendo un periodo muy difícil, con guerras, personas que viven situaciones complejas, familias separadas, y que es una mirada sin prejuicios”, señaló la directora y fundadora del Premio Kineo, Rosetta Sannelli, quien hizo entrega del premio en una ceremonia en los jardines vaticanos.
Entre las razones para otorgar este Kineo -que cumple 18 años y en otras ocasiones ha sido entregado en el festival de Venecia- al director de Francesco, se señala que el documental “ilustra el pensamiento y la obra de este papa volcánico e imparable. Una personalidad de gran profundidad a nivel mundial, independientemente de sus creencias o juicios personales”.
“Su conciencia civil, su compromiso con el respeto al medio ambiente para preservarlo para las generaciones futuras y su conciencia de la historia en relación con las tragedias de nuestro siglo son, de hecho, rasgos de una humanidad sublime que se destaca en cada escena de la película”, añade el fallo.
En la ceremonia, el director de origen ruso y nacionalidad estadounidense, que fue nominado al Oscar en 2016 con Winter on Fire por un documental sobre los sucesos de Ucrania, y en 2018 a 3 Emmy por Cries from Syria, dijo estar “orgulloso” por este reconocimiento.
“Estoy muy orgulloso de que Francesco pueda iniciar ya su camino”, para que el mundo escuche las voces de los refugiados, de las víctimas de abusos sexuales, la lucha contra el cambio climático y aprendamos de las “fascinantes acciones del papa” para cambiar las mentes y tratar de salvar a la Humanidad de todos los desastres, señaló el realizador.
En toda la ceremonia planeó el eco de la polémica causada ayer, tras el estreno del documental en el Festival de Cine de Roma, por un momento en que el Papa aboga por una ley de uniones civiles para los homosexuales.
“Los homosexuales tienen derecho a estar en una familia. Lo que debe haber es una ley de unión civil, de esa manera están cubiertos legalmente”, afirma el pontífice en el documental.
Una declaración que no está claro si la dijo al director en uno de los encuentros con el Papa a lo largo de tres años de filmación o pertenece a material de archivo.
En la ceremonia estaba presente el prefecto del Dicasterio de Comunicación del Vaticano, Paolo Ruffini, que, en contra de lo previsto, no pronunció ninguna palabra y abandonó el lugar sin hacer ningún tipo de declaración.
El Vaticano no ha emitido ningún comunicado acerca de esta toma de posición del Papa acerca de las parejas gays, y el cineasta tampoco quiso responder a preguntas sobre este asunto.
La fundadora del premio Kineo, Rosetta Sannelli, dijo a Efe que “no esperaba esta polémica, creo que no han visto bien la película”.
Las palabras del papa “nacen de una consulta que le hace al papa una pareja gay con tres hijos, le preguntan si deben mandar a los niños a la escuela o tenerlos en casa separados, y el papa les dice que deben ir a la escuela con los otros niños”, comenta.
En su opinión, “de una respuesta de sentido común, de este hecho objetivo y justo, no segregar a esos niños, ha nacido esta polémica porque el papa después dice que estas uniones deberían tener una tutela legal, pero no ha dicho que los sacerdotes celebrarán uniones gays”.