La miel de abeja no lo sirve como edulcorante natural, también funciona como un producto de belleza. Conoce algunos trucos y aprovecha los beneficios que te ofrece este manjar.
Exfolia tu piel.
La exfoliación con miel ayuda a remover las células muertas de la piel, ya que contiene ácido glucónico. Si deseas estar libre de impurezas, te enseñamos como hacerlo fácil y desde la comodidad de tu hogar.
Mezcla ½ taza de azúcar y 3 cucharadas de miel en un recipiente hasta obtener una pasta espesa. Luego añade 2 cucharadas de aceite de oliva para hidratar la piel con mayor profundidad. Remueve todos los ingredientes hasta que se integren bien. Aplica el producto sobre tu rostro con masajes circulares y déjalo actuar durante 10 minutos. Para finalizar, retira con abundante agua tibia. Realiza esta receta casera una vez por semana y veras como tu piel se sentirá más suave y revitalizada.
Dile adiós a los labios resecos.
Los labios son una parte delicada del cuerpo, y no siempre se les da el cuidado necesario. Para tenerlos hidratados todo el día, aplica un poco de miel por la noche y despertarás con los labios más suaves.
Otro truco para lucir unos labios saludables es exfoliarlos. Mezcla una cucharadita de miel y una de bicarbonato de sodio hasta conseguir una masa homogénea. Colócala en los labios y déjala actuar algunos minutos. Luego de que penetre bien enjuaga con agua tibia, sécalos con un paño de algodón y aplica un poco de bálsamo hidratante.
Cabello manejable en sólo un paso.
Para que tu cabello esté más sedoso, agrega unas gotas de miel al momento de aplicar el champú. Masajea el cuero cabelludo, deja que actúa por 5 minutos y enjuaga con agua templada. Esto hará que tus hebras recuperen brillo y sean más manejables.
Si planeas hacerte una hidratación natural en el cabello, agrega miel de abeja para aumentar su eficacia y aportar más nutrientes a tu melena.